¿Cómo tomar mejores y más rápidas decisiones? Esa es una buena pregunta. A diario tomamos decisiones: desde que vamos a desayunar, hasta elegir lo que vamos a usar para salir de casa.
Lo mismo sucede en el entorno laboral. Pues es una realidad que el perfil del talento que se busca en las empresas para conformar equipos de trabajo debe tener conocimientos técnicos, trabajo en equipo, buenas relaciones interpersonales, motivadores, empáticos, auto liderazgo y sobre todo agilidad en la toma de decisiones.
Por una u otra razón, la mayoría de las personas fallan en ese último aspecto. Bien sea porque sienten temor, duda, incertidumbre, etc. En fin, tomar decisiones exige la elección entre varias opciones, tomando en cuenta los recursos con que se cuenta, el objetivo que se busca y el resultado deseado.
Tipos de decisiones
Existen dos tipos de decisiones: Por método y por nivel
Las decisiones por método son aquellas que mantienen una estructura, son racionales, guiadas por unos lineamientos que a lo largo del tiempo se vuelven rutinarias, repetitivas y cuyos resultados son predecibles.
Las decisiones por niveles no llevan una estructura y en el que juega un papel importante la emoción. No se originan desde un método, sino que se van desarrollando en cada minuto. Son totalmente impredecibles los resultados.
Es recomendable, que antes de decidir, tengamos en cuenta diferentes aspectos de las situaciones. Ser más intuitivos y no dejar que el entorno influya en nuestras decisiones.
Aspectos que debemos tomar en cuenta para tomar mejores y más rápidas decisiones
Existen infinidad de métodos para tomar decisiones, tomando en cuenta la ocasión y el asunto a definir. A continuación, se destacan los más frecuentes.
- Evaluación de los beneficios y perjuicios
Este método es uno de los más usados y a su vez es empleado inconscientemente cuando se mide los pros y contras. Lo que suele aparecer aquí es el sesgo cognitivo, un atajo mental que busca siempre referencias de experiencias anteriores, las conecta con el problema actual, y puede incidir en el resultado de la decisión a escoger.
- Matriz FODA
Este método es simple de aplicar. Facilita gráficamente las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas a la hora de tomar decisiones.
- Matriz Océano Azul
En esta matriz se trabajan cuatro cuadrantes donde se colocan los criterios a decidir sobre un tema específico: ¿Qué eliminar?, ¿Qué reducir, ¿Qué incrementar? ¿Qué crear?
- Diagrama de Ishikawa
Este diagrama se conoce también con el nombre de espina de pescado. Aquí se presenta el problema verticalmente sobre el espinazo del pez y de allí se derivan las espinas que serían los asuntos a definir. Este modelo es más preciso a la hora de tomar decisiones, porque mediante la gráfica clarifica la mejor opción para decidir.
En conclusión, es importante aprender a tomar decisiones y conocer sus implicaciones. Los negocios y grupos de trabajo que sobreviven en el mundo empresarial, están determinados por la buena toma de decisiones. Por eso, es indispensable que los líderes empresariales y colaboradores asuman su poder de decisión dentro de los aspectos que les compete para alcanzar la efectividad y eficiencia frente a la competencia.
